En el marco del sesenta aniversario del voto de las mujeres en México, el Presidente Enrique Peña Nieto presentó una iniciativa en miras de propiciar un incremento de la participación política de las mujeres, mediante la inclusión en el Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales (COFIPE) de la paridad de género como acción afirmativa, sustituyendo a la cuota de género hasta ese entonces existente que establecía una distribución 40 / 60 de las candidaturas.
Asimismo, se estableció que las fórmulas presentadas por los partidos políticos deben estar integradas por el mismo género, con la finalidad de erradicar la práctica de sustituciones mejor conocida como “Juanitas”, en donde mujeres –una vez llegado al cargo- cedían su posición a un hombre; perdiendo así la oportunidad de alcanzar la paridad (o por lo menos de cerrar la brecha de género) en la conformación de los órganos de representación popular.
Cabe hacer mención que dichos avances, en términos de modificaciones a la legislación, no hubieran sido posibles sin el precedente que existe en nuestro país en torno a las cuotas de género desde 1993 y, sin la aportación de la Sentencia 12624 del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación que, como primeros efectos, provocó que por primera vez hubiera un porcentaje mayor al 30% de participación femenina en el Congreso de la Unión y, en cierta proporción, también se incrementara a nivel local.
De tal forma que, en el caso específico del Distrito Federal y, a raíz de dichos preceptos, se estableció en el artículo 297 del Código de Instituciones y Procedimientos Electorales del Distrito Federal (COIPEDF) que Los partidos políticos promoverán y garantizarán la paridad entre los géneros, en la postulación de candidatos a los cargos de elección popular para la integración de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal y Jefes Delegacionales. El Instituto Electoral tendrá facultad para rechazar el registro del número de candidaturas de un género que exceda la paridad, fijando al partido un plazo improrrogable para la sustitución de las mismas. En caso de que no sean sustituidas no se aceptarán dichos registros.
Este hecho provocó que los partidos políticos presentaran el mismo número de candidatos que de candidatas, a la par de considerar las probabilidades de triunfo en los distritos electorales, incrementando así las posibilidades de que un mayor número de mujeres participen –en este caso- en la integración de la ALDF y como jefas delegacionales.
Al respecto, cabe destacar que el Consejo General del Instituto Electoral del Distrito Federal aprobó el Acuerdo 69/2015 en el que se establecieron los criterios para la conformación de la Lista Definitiva de las fórmulas de las y los candidatos a Diputados(as) de Representación Proporcional, con los que con base en su argumentación pretende ser un mecanismo que abone a garantizar la paridad efectiva, ya que busca que dicha lista esté configurada de manera alternada, es decir hombre / mujer o mujer / hombre, según sea el caso.
Hasta el día de hoy, según los resultados preliminares, de los 40 distritos electorales, 25 fueron ganados por hombres y 15 por mujeres; por lo que se debe esperar a la conformación de las listas con base en los artículos 291 y 292 del COIPEDF y del citado Acuerdo para conocer la conformación de la ALDF.
Si bien, la recién jornada electoral provocó una reconformación de fuerzas tanto en el Distrito Federal como en el resto de las entidades y, uno de los puntos a considerar refiere a los primeros resultados visibles en cuanto a la participación política de las mujeres.
Por ello es menester mencionar que en esta ocasión, cuatro de las 16 delegaciones estarán gobernadas por mujeres (Álvaro Obregón, Iztapalapa, Miguel Hidalgo y Tlalpan), a diferencia de la actual administración con cinco demarcaciones (Gustavo A. Madero, Iztacalco, Magdalena Contreras, Tláhuac y Tlalpan).
Cabe destacar que, desde el año 2000, el Distrito Federal ha contado con 80 jefaturas delegacionales, de las cuales 18 han estado presididas por mujeres, es decir el 22.5 por ciento. Siendo Benito Juárez, Cuajimalpa y Xochimilco las delegaciones donde no se ha presentado alternancia de género.
Si bien, lo anterior refleja únicamente elementos cuantitativos y no cualitativos, busca servir como ejercicio introductorio para medir los avances y/o retrocesos respecto a la participación política de las mujeres en el Distrito Federal, a la par de analizar los primeros resultados de la normatividad vigente; todo ello con la finalidad de que, en el próximo proceso electoral, se cuenten con los mecanismos que garanticen a las mujeres el pleno ejercicio de sus derechos políticos y, con ello, la paridad efectiva.
Comentarios recientes